El romance a escena.

¿De qué va? 

Una película sobre el amor, el amor en todas sus formas posibles. 

La tercera reunión entre Joe Wright y Keira Knightley, tras las celebradas 'Orgullo y prejuicio' y 'Expiación: más allá de la pasión', es la adaptación de la obre homónima de León Tolstói. Novela que en rasgos muy básicos relata las aventuras y desventuras personales de Anna Karenina, una estremecedora historia de adulterio en el ámbito de la alta sociedad rusa de finales del XIX.

¿Qué nos ofrece?

Ante todo, Anna Karenina es un película original, sobre todo a la hora de plantear los escenarios en los que se desarrolla la hora. El teatro como ciudad y representación de la comunidad urbana rusa, es el marco principal de la historia. Aquí Joe Wright se desenvuelve con maestría. La escenografía es absolutamente hipnótica. Técnica la película es una gozada. Las transiciones son perfectas. Las historias perfectamente enlazadas. El diseño de producción, el vestuario... absolutamente todo calculado al milímetro, y una fotografía preciosa. 

En cuanto a los actores, cabe centrarse en los dos principales, sin desmerecer al resto. Keira Knightley soberbia, más bella que nunca. Afronta su personaje con garra, con pasión, dolor y arrepentimiento. Ella es media película, y sale victoriosa. Por otro lado, nos encontramos a Jude Law (el agraviado), en uno de sus personajes más inspirados en años, convence y conmueve. Las escenas entre ambos son antológicas. Y no olvidar a Aaron Johnson, el tercero en discordia, que se gana sus escenas a pulso, admirable actuación. En general, el reparto está perfecto, nadie desentona, y se agradece. 

Hasta aquí todo es perfecto. Solo se le puede poner una pega a una película casi redonda. Al conjunto final le falta fuerza, pasión... el drama de los personajes no impacta de la manera que debería. Sí se nos transmite el juicio al que son sometidos de manera brillante, se nos incomoda, y nos identificamos con ellos, pero en algún momento a la película le falta un último impulso que la hubiera hecho redonda. En definitiva, sólido film, grandes actuaciones, pero falla a la hora de transmitir la pasión de los personajes, a pesar de contar con momentos inolvidables.

Sus puntos fuertes: 
+ Keira Knightley, enorme.
+ Visualmente la película es intachable. Una delicia.
+ Joe Wright demuestra su maestría una vez más.

Sus puntos débiles: 
- El conjunto se siente algo frío.
- Pierde ritmo una vez salimos del teatro.

¿Hay que verla?
Por supuesto. Merece la pena. Sus defectos no deben impedirnos disfrutar de una muy buena película con un Joe Wright y una Keira Knightley inspirados.  En un año menos copado, aspiraría a todo en la temporada de premios.

La frase:
"No puedes preguntar el porqué del amor..."
"No puede haber paz para nosotros, solo misera y la felicidad más grande".
"Sé que no es una criminal, pero rompió las reglas".

El momento: 
Cualquier escena en el teatro. Los bailes son mágicos. El juego de espejos del final.

La llave azul otorga a 'Anna Karenina' un 8 de nota.